Un árbol de patchwork de Navidad viaja a Noruega...

Lo sé, estaréis pensando que se me ha ido la pinza por el título de mi entrada, y aunque pudiera ser no es el caso. Me explico mejor. Los que me conocen mucho saben que a los catorce años me pasó algo increíble de lo que nunca estaré lo suficientemente agradecida a mis padres (aunque en ese momento no dejara de llorar porque no quería que pasase): me mandaron a un colegio en Newbury por primera vez: Cheam, y allí conocí a personas maravillosas algunas de las cuales han llegado a ser parte muy importante de mi vida, así como de toda mi familia. 

Una de ellas es Anine, una amiga noruega que desde entonces hemos estado unidas, primero a través de viajes en verano a ese colegio y luego en casa de nuestras respectivas familias. Con el paso de los años llegaron bodas, hijos y a todo hemos acudido y nuestras familias han encajado a la perfección.

 ¿Y qué rollo cuenta hoy Elena? pues eso, que estoy nostálgica, que siempre ha sido muy importante para mi el tema de las relaciones humanas y que pese a todo sigo sintiendo igual. Y Anine tenía un árbol precioso en su jardín noruego, lleno de nieve en Navidades, un árbol que daba una paz tremenda al mirarlo por lo bello que era, y del cual me acuerdo mucho, así como de nuestras conversaciones frente a él mientras los maridos e hijos jugaban por ahí...confidencias de amigas, amistad verdadera que no sólo se mantiene por verse todos los días, sino que cuando te ves continúas donde te quedaste.

Sé que muchos me entendéis, las mujeres sobretodo y que no lo perdamos nunca!!! Sirva esta entrada para deciros GRACIAS amigas por estar ahí, cerca, lejos, muy lejos o porque no nos conocernos todavía!!

Y ahora al tema de patchwork y labores, verdad? Pues le he hecho un árbol que ya me hice yo la Navidad pasada, que decora mucho no ocupa demasiado y siempre cabe en algún sitio por muchas cosas que tengamos. Y espero que cada vez que lo mire recuerde lo mucho que la echo de menos!!

He querido hacer una foto al lado de un jarrón lleno de conchas de playa cogidas por mis hijos que quieren mucho a sus amigos noruegos, y que representa que en Valencia estamos a 30 grados y ellos ya con nuestra temperatura navideña..en féin, lo sé, tengo un punto filosófico hasta en la foto..jajaja

Ya está viajando junto a un regalo de cumpleaños que le he mandado en la caja y del cual no me he acordado de hacer foto..

Y por si alguna no recuerda los pasos a seguir dejo un collage de los pasos, tutoriales hay muchos en la red, pero así veis que este es a mi estilo...jaja

Si todavía sigues leyendo es que me aprecias mucho porque menudo tostón he escrito..jaja Ahora será más rápido, ya que os dejo unas fotos de cosas en las que ando metida:

Una cesta que le hice a mi madre por su santo y que en la foto pensé que usaría de lapicero y lo puse junto a la agenda que mi amiga Prady me regaló. En la realidad lo usa para los abanicos y queda estupendamente, me falta esa foto, ups...

Una foto de mi primer yoyo para una cosa que me ronda la cabeza:

y obviamente sigo acolchando a mano el quilt de mi madre y haciendo hexágonos con telas de navidad sin un proyecto concreto por el momento...Y he empezado a tricotar, jaja, bueno tejer con dos agujas y con el punto derecho y revés que ya me han enseñado me lanzo a la piscina y espero poder enseñaros pronto lo que tengo empezado.

Avances del mini quilt del SAL que nos propuso el curso pasado Nati:

Y esto es todo por ahora. Espero poder acabar pronto los proyectos que llevo adelante que quiero regalarlos ya!!.

Un beso,

Elena